Hay ocasiones en las que obviamos ciertas cosas, tareas… dada su sencillez, y cambiar las escobillas de los limpiaparabrisas es una de ellas. Es de los mantenimientos para tu vehículo más sencillos. ¿Y por qué es importante? Eso es lo que te contamos hoy…

Para cambiar las escobillas tienes la opción de llevar tu coche al taller o hacerlo tú mismo pues es algo económico. Solo necesitas el juego nuevo, algo de paciencia y un poquito de maña.

¿Por qué debes hacerlo?

La primera razón es la seguridad, pues unas escobillas de limpiaparabrisas en mal estado pueden reducir hasta un 20% la visibilidad y la segunda es que si están en mal estado, pueden hasta rayar el cristal.

¿Cuándo debe hacerlo?

Un signo evidente de que algo falla es el ruido al ponerlas en marcha, otro es el arrastre de suciedad a lo largo del cristal. En lugar de limpiar, mancha más.

Si no notas nada raro, lo recomendable es hacer el cambio cada dos años.

¿Y cómo hacerlo?

  1. Comprueba que las nuevas escobillas son las adecuadas para el modelo de tu coche.
  2. Coloca las escobillas antiguas para cambiarlas en posición vertical.
  3. Levanta el brazo móvil y extrae una.
  4. Inserta la nueva hasta que encaje y repite el mismo paso con la otra.
  5. Haz las comprobaciones necesarias para ver que funcionan a la perfección. Si no es así, sácalas y vuelve a intentarlo.

En cualquier caso, si vienes a Área365 podemos ayudarte ante cualquier situación.